En un operativo realizado tras los recientes bloqueos en Comitán, Chiapas, 92 policías fueron detenidos junto con 30 civiles. Las autoridades informaron que estos bloqueos impactaron significativamente la movilidad y la actividad cotidiana en diversas localidades de la región.
Acciones de las autoridades
El conflicto surgió cuando un grupo de manifestantes, entre ellos policías y civiles, bloquearon varias carreteras como parte de una protesta por demandas laborales no atendidas. Las autoridades locales actuaron rápidamente para restablecer el orden y asegurar la libre circulación en las zonas afectadas.
El Secretario de Seguridad del Estado declaró que las negociaciones previamente establecidas no lograron cumplir con las expectativas de los manifestantes, lo que conllevó a la escalada del conflicto. Las fuerzas del orden implementaron medidas para garantizar la seguridad de los ciudadanos y retomar el control de las vías de comunicación.
El operativo concluyó con la detención de:
- 92 policías involucrados en los bloqueos.
- 30 civiles que participaron activamente en las manifestaciones.
Los detenidos fueron trasladados a dependencias correspondientes para determinar su nivel de participación en los hechos y proceder conforme a la ley. Además, se están evaluando posibles sanciones administrativas y penales para los elementos de las fuerzas del orden implicados en estos actos.
“Estaremos tomando todas las medidas necesarias para esclarecer los hechos y asegurar que este tipo de situaciones no se repitan en el futuro”, enfatizó el funcionario estatal.
Este tipo de manifestaciones son reflejo de las tensiones laborales existentes en el sector de seguridad, un tema que el gobierno estatal ha prometido abordar con mayor atención en busca de soluciones efectivas.
La situación actual es seguida de cerca por la administración estatal, que ha expresado interés en entablar diálogos abiertos con los diferentes colectivos y buscar resolver sus inquietudes. Se espera que en los próximos días se establezcan mesas de trabajo para negociar y prevenir futuros disturbios.