En un evento reciente en la Casa Blanca, el presidente Joe Biden declaró que la Enmienda de Igualdad de Derechos (ERA, por sus siglas en inglés) es ahora una ley, a pesar de la incertidumbre sobre su impacto real debido a complicaciones legales persistentes. Esta enmienda, que tiene como objetivo garantizar la igualdad de derechos bajo la ley sin discriminación por motivos de sexo, ha sido objeto de debate desde que fue propuesta hace más de 50 años.

Contexto y desafíos legales

La ERA fue aprobada por el Congreso en 1972 y necesita ser ratificada por 38 estados para formar parte de la Constitución. Sin embargo, la fecha límite original establecida para su ratificación expiró en 1982. A día de hoy, 38 estados han ratificado la enmienda, pero el estatus legal de estas ratificaciones es disputado debido a esta fecha límite vencida. Algunos estados incluso han intentado retirar su ratificación, añadiendo otra capa de complejidad al proceso.

A pesar de las complicaciones, el presidente Biden ha mostrado su apoyo decidido a la enmienda. Durante su declaración, expresó la importancia de reafirmar el compromiso del país con la igualdad de género, mencionando:

“La igualdad bajo la ley es un derecho fundamental que todos los estadounidenses merecen, independientemente de su género.”

La administración de Biden argumenta que el Congreso tiene el poder de extender o eliminar el plazo para la ratificación de la ERA, lo que abriría una vía potencial para su inclusión formal en la Constitución.

La aceptación de la ERA plantea cuestiones sobre cómo se aplicaría en campos como el empleo, la salud reproductiva y los derechos de orientación sexual. Los partidarios creen que proporcionaría un mecanismo sólido para desafiar las leyes y políticas que discriminan por razón de género.

• La ERA fue aprobada por el Congreso en 1972.
• Requiere la ratificación de 38 estados para convertirse en ley.
• Hasta ahora, 38 estados han ratificado la enmienda.
• La fecha límite original de ratificación expiró en 1982.

El futuro de la Enmienda de Igualdad de Derechos sigue siendo incierto y dependerá de futuros desarrollos legales y políticos. A medida que el debate continúa, la declaración del presidente Biden podría impulsar nuevas discusiones sobre cómo garantizar efectivamente la igualdad de derechos en la nación.