La publicidad engañosa de los influencers ha puesto a la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en una situación complicada. En el marco del creciente uso de redes sociales y la influencia que estas figuras digitales tienen sobre sus seguidores, surge la preocupación sobre la autenticidad de los productos y servicios que promocionan.

El impacto de las redes sociales

En los últimos años, las redes sociales han ganado terreno como una de las principales plataformas publicitarias. Con millones de seguidores, los influencers tienen la capacidad de llegar a una audiencia amplia y diversa. Sin embargo, muchas de estas promociones podrían no cumplir con la normativa vigente y ser consideradas publicidad engañosa.

De acuerdo a un estudio reciente, se identifican diversos problemas relacionados con la publicidad en redes sociales, especialmente cuando se trata de influencers que no revelan si están recibiendo compensación por promocionar ciertos productos.

“La Profeco ha recibido un número creciente de quejas sobre promociones engañosas realizadas por influencers”, comentó un portavoz de la Procuraduría.

La Profeco ha lanzado una serie de advertencias y recomendaciones tanto para los consumidores como para los propios influencers con el objetivo de regular la transparencia en las promociones y evitar el engaño al consumidor.

Algunos datos importantes que la Profeco ha compartido incluyen:

• El 40% de los consumidores mexicanos han comprado un producto promovido por un influencer.
• El 60% de estas compras resultaron en una experiencia insatisfactoria.
• Más del 70% de los consumidores no eran conscientes de que el contenido era patrocinado.

Ante este panorama, la Profeco ha instado a los influencers a ser más transparentes y honestos sobre la naturaleza de sus publicaciones, subrayando la importancia de indicar claramente cuando una promoción es pagada. Asimismo, se anima a los consumidores a ser críticos y cautelosos con las recomendaciones de productos en redes sociales.

La Profeco continua monitoreando las actividades de los influencers y planea implementar medidas más estrictas para asegurar que la publicidad en redes sociales cumpla con las normas y no engañe a los consumidores.