Una fuga de gas en la planta de Shell en Deer Park, Texas, dejó un saldo trágico de dos personas fallecidas y 35 heridos. El incidente se registró el fin de semana, cuando se detectó la liberación de un gas inflamable que provocó una explosión en la instalación petroquímica.

Impacto y respuesta de los equipos de emergencia

La explosión fue lo suficientemente potente como para sentirse en áreas cercanas a la planta. Las autoridades locales coordinaron una rápida respuesta de los equipos de emergencia para controlar la situación. Personas que estaban cerca del lugar fueron evacuadas como medida de precaución.

Shell, la empresa propietaria de la planta, emitió un comunicado lamentando profundamente el incidente y expresando sus condolencias a las familias de las víctimas. Además, anunciaron que colaborarán plenamente con las investigaciones para determinar las causas exactas de la fuga de gas. Un portavoz de Shell declaró:

“Estamos comprometidos a garantizar la seguridad de nuestra comunidad y nuestros empleados. Vamos a implementar todas las medidas necesarias para corregir y prevenir futuros incidentes”.

Las autoridades de seguridad industrial ya han iniciado las investigaciones correspondientes para identificar cualquier posible negligencia o fallo técnico que pudiera haber contribuido al accidente. Mientras tanto, los heridos están recibiendo atención médica y algunos han sido trasladados a hospitales locales debido a la gravedad de sus lesiones.

De acuerdo con las cifras proporcionadas por los equipos de emergencia:

• 2 personas fallecieron en el incidente.
• 35 personas resultaron heridas, algunas con quemaduras y lesiones de diversa gravedad.

Este lamentable suceso recuerda la importancia de las medidas de seguridad en instalaciones industriales. Las comunidades cercanas a la planta en Deer Park están preocupadas por los posibles riesgos futuros, mientras que las autoridades buscan garantizar que se implementen todas las medidas preventivas necesarias.