El cierre temporal en el Poder Judicial de la Federación (PJF), derivado de las protestas de sus trabajadores tras la desaparición de 13 fideicomisos, ha resultado en una significativa acumulación de audiencias pendientes, afectando el avance de miles de casos judiciales en México.
Impacto del cierre en las audiencias
Desde el inicio del paro el 23 de octubre, diversas audiencias, especialmente aquellas de materia penal que requieren presencia física, han sido suspendidas. Esta situación está llevando a un creciente retraso en los procedimientos judiciales, según fuentes dentro del sistema.
Estadísticas relevantes del impacto incluyen:
- Cerca de 5,000 audiencias se han aplazado en la Ciudad de México.
- En el Estado de México, el retraso afecta a más de 2,500 audiencias.
- A nivel nacional, se estima que unas 10,000 audiencias se han pospuesto debido al paro.
Las actividades de los juzgados se encuentran paralizadas en su mayoría, afectando a todas las regiones del país. Durante una conferencia de prensa, un funcionario cercano a la situación comentó sobre la gravedad del tema:
“El paro tiene un impacto directo en la impartición de justicia. Las personas detenidas en espera de audiencias de control u otros procesos están sufriendo demoras interminables.”
El paro se originó en respuesta a la eliminación de los fideicomisos del PJF, acción que según los trabajadores, atentaría contra su estabilidad laboral y las condiciones de trabajo en general. Esta medida ha sido percibida como parte de una serie de reformas que buscan centralizar y reducir presupuestos.
A pesar de los intentos de negociación entre los representantes de los trabajadores y las autoridades, hasta ahora no se ha logrado un acuerdo satisfactorio que permita reanudar las actividades judiciales. Mientras tanto, el retraso en los procesos judiciales sigue aumentando, afectando a miles de ciudadanos que esperan el curso justo y oportuno de sus trámites legales.