La agencia calificadora Moody’s ha cambiado la perspectiva de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) de estable a negativa. Esta decisión fue tomada considerando los retos operativos y financieros que enfrenta la empresa estatal mexicana en medio de un entorno desafiante para el sector energético en el país.

Razones del cambio de perspectiva

Moody’s señaló que la CFE enfrenta múltiples presiones. Un factor clave es el alto nivel de inversión de capital que la empresa necesita para mantener y expandir su infraestructura. Además, la CFE está lidiando con altos costos de compra de energía y combustibles, lo cual afecta su rentabilidad.

La calificadora también mencionó otros riesgos que podrían impactar negativamente a la CFE en el futuro:

• Dependencia significativa en los subsidios gubernamentales para operaciones diarias.
• Exposición a fluctuaciones en los precios internacionales del gas natural.
• Vulnerabilidad ante condiciones climáticas adversas.

En este contexto, Moody’s afirma que la empresa enfrenta una creciente presión sobre su flujo de efectivo, lo que podría dificultar su capacidad para cumplir con sus obligaciones financieras.

“La perspectiva negativa refleja nuestra visión de que los retos operativos y financieros de la CFE podrían aumentar en el mediano plazo”, indicó un analista de Moody’s.

Estos desafíos podrían, potencialmente, llevar a una reevaluación de la calificación crediticia de la CFE, que actualmente se encuentra en un nivel que sugiere una calidad moderada de crédito y un riesgo crediticio que puede experimentar un deterioro en condiciones económicas adversas.

A pesar de la perspectiva negativa, Moody’s mencionó que la CFE sigue desempeñando un papel crucial en el sector energético de México y que cuenta con el respaldo del gobierno federal. Sin embargo, advirtió que las medidas adoptadas por la administración podrían no ser suficientes para mitigar los riesgos señalados.

En resumen, la Comisión Federal de Electricidad enfrenta un camino difícil ante los retos financieros y operativos actuales. La observación cuidadosa de estas condiciones y la implementación de estrategias efectivas serán cruciales para superar estas dificultades y garantizar la estabilidad a largo plazo de la empresa.