En un contexto de creciente inquietud por la violencia que azota a Honduras, el presidente del Congreso Nacional, Luis Redondo, condenó enérgicamente los actos violentos y la inseguridad. Sin embargo, también dirigió críticas hacia Romeo Vásquez Velásquez, retirado general del Ejército y ahora político, por su papel en el golpe de Estado de 2009 que derrocó al entonces presidente Manuel Zelaya.

Acusaciones contra Romeo Vásquez Velásquez

Durante su intervención, Redondo hizo hincapié en el impacto a largo plazo del golpe de Estado sobre el país. Argumentó que este evento no solo desestabilizó a Honduras, sino que también abrió la puerta a un aumento de la violencia y la corrupción. Redondo afirmó que el golpe de Estado tuvo un efecto negativo duradero, exacerbando los problemas de seguridad que persisten hasta hoy.

Redondo expresó su preocupación por la violencia generalizada en el país y los retos que enfrenta el sistema de justicia para lidiar con este problema. En sus declaraciones, subrayó que las instituciones del Estado deben unirse para abordar estas cuestiones de manera eficaz y proteger a la ciudadanía.

“Los hondureños merecen un país seguro y estable, y es nuestra responsabilidad trabajar juntos para lograrlo”.

El Congreso Nacional, según Redondo, está comprometido a implementar reformas legales y estructurales para mejorar la seguridad y combatir la corrupción. Asimismo, hizo un llamado a todos los sectores políticos a dejar de lado las diferencias partidistas y unirse en la lucha contra la delincuencia.

Para ilustrar los desafíos que enfrenta el país, Redondo ofreció algunas cifras preocupantes sobre la violencia en Honduras:

• Honduras es uno de los países con las tasas de homicidio más altas del mundo.
• La impunidad en casos de violencia alcanza altos porcentajes.
• El crimen organizado y las pandillas controlan extensas áreas del territorio nacional.

En este contexto, el país se encuentra en una encrucijada, buscando soluciones efectivas para revertir años de violencia y desconfianza en las instituciones públicas. Redondo insistió en que el cambio es posible a través de la cooperación y el compromiso