En una sesión reciente del Senado de los Estados Unidos, ejecutivos de Visa y Mastercard fueron interrogados sobre las tarifas elevadas que imponen en las transacciones con tarjeta. La audiencia forma parte de un esfuerzo más amplio para abordar las preocupaciones sobre el impacto financiero que estas tarifas tienen en los comercios y, en última instancia, en los consumidores.

Preocupaciones legislativas

Los senadores plantearon preguntas incisivas a los ejecutivos respecto a las tarifas de intercambio, comúnmente conocidas como “swipe fees”, que los minoristas deben pagar cada vez que un cliente usa una tarjeta de crédito. Este costo ha sido un punto de contención durante años, ya que muchos argumentan que las tarifas son excesivamente altas y perjudican tanto a los pequeños negocios como a los consumidores.

Los legisladores destacaron que:

• Las tarifas de intercambio han aumentado significativamente en la última década.
• Los comercios estadounidenses pagaron alrededor de 126 mil millones de dólares en tarifas de tarjetas de crédito y débito en 2022.
• Estos costos son finalmente transferidos a los consumidores en forma de precios más altos.

El senador Dick Durbin fue particularmente vocal en su crítica, resaltando que estas tarifas representan una carga innecesaria para los negocios y familias. Durbin señaló que, en comparación con otros países, las tarifas en Estados Unidos son desproporcionadamente altas.

“Es inaceptable que los comercios y consumidores estadounidenses deben soportar estos costos simplemente por utilizar un método de pago común”, dijo Durbin.

Por su parte, los ejecutivos de Visa y Mastercard defendieron sus políticas, alegando que las tarifas que cobran son necesarias para cubrir los costos de procesamiento y para financiar medidas de seguridad avanzadas que protegen contra el fraude.

Los ejecutivos también argumentaron que las tarjetas de crédito ofrecen beneficios importantes a los consumidores, como recompensas y protección contra fraudes, y que cualquier cambio en las tarifas podría afectar estos servicios.

El debate sobre las tarifas de intercambio continuará en el Senado, donde se espera que se presenten más testimonios de diferentes partes interesadas, incluidos minoristas y defensores de los consumidores, para evaluar posibles reformas regulatorias que alivien el impacto de estas tarifas.