La temporada del Buen Fin, que se lleva a cabo del 17 al 20 de noviembre, ha provocado una notable intensificación en la demanda de créditos en México, así como un incremento en el uso de tarjetas de crédito tanto físicas como digitales. Esta iniciativa, que busca impulsar el consumo antes de las fiestas navideñas, ha captado la atención de consumidores y entidades financieras por igual.

Crecimiento en solicitudes de crédito

De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), se ha observado un incremento en las solicitudes de crédito en todo el país. Algunas entidades bancarias han percibido un incremento en la demanda de tarjetas de crédito nuevas y un uso más intensivo de las ya existentes.

Los incentivos y descuentos ofrecidos durante el Buen Fin son un atractivo importante para los consumidores, que buscan aprovechar las ofertas en una amplia gama de productos. Las instituciones financieras han respondido promoviendo sus productos crediticios, lo que ha resultado en un repunte en la actividad del sector.

En el ámbito de los créditos al consumo, las estadísticas reflejan un aumento en las solicitudes. Durante el Buen Fin se espera que esta tendencia continúe creciendo. Las entidades bancarias han implementado estrategias específicas para captar clientes, entre las que destacan:

• Descuentos en tasas de interés.
• Meses sin intereses en compras seleccionadas.
• Bonificaciones adicionales por el uso de tarjetas propias.

Un representante de la Condusef comentó al respecto:

“El Buen Fin es una oportunidad no solo para los consumidores, sino también para las instituciones financieras, que ven un alza en la actividad crediticia.”

Los expertos financieros aconsejan a los consumidores ser prudentes y planificar sus compras para no exceder su capacidad de endeudamiento. Recomiendan también revisar las condiciones y promociones de cada entidad financiera para tomar decisiones informadas y evitar sorpresas desagradables en el futuro.

Con esta dinámica, el Buen Fin se consolida como una fecha de gran impacto económico, estimulando tanto el comercio como el sector financiero, proporcionando un entorno donde los consumidores pueden adquirir productos a precios competitivos mientras consideran sus opciones de financiamiento