La ciudad de Culiacán vivió una jornada de violencia extrema tras una serie de bloqueos, enfrentamientos armados y ataques que pusieron en alerta a las autoridades y a la población. Estos eventos ocurrieron a raíz de la detención de un destacado líder criminal, lo que desencadenó una respuesta por parte de grupos delictivos en la región.

Escalada de violencia

Las principales avenidas de la ciudad fueron bloqueadas con vehículos incendiados, mientras que en varias zonas se registraron intensas balaceras. Estos acontecimientos obligaron a las autoridades a desplegar un operativo de seguridad para intentar controlar la situación, que a su vez generó pánico y caos entre los habitantes.

Una de las áreas más afectadas fue el norte de la ciudad, donde se reportaron enfrentamientos armados que duraron varias horas. En respuesta, el gobierno estatal emitió un comunicado pidiendo a la población que permaneciera en sus hogares para evitar ponerse en riesgo.

El gobernador del estado exhortó a la ciudadanía a mantener la calma y aseguró que se estaban tomando medidas para restablecer el orden.

A raíz de estos hechos, varios vuelos locales e internacionales fueron cancelados, y las escuelas suspendieron clases. Además, se informó de interrupciones en los servicios de transporte público.

Entre las estadísticas de la violencia que se vivió en Culiacán se destacan:

• Más de 20 bloqueos en distintos puntos de la ciudad.
• Múltiples enfrentamientos armados durante el día.
• Varias unidades de transporte público y vehículos particulares incendiados.

La situación en Culiacán ha puesto de manifiesto la capacidad de respuesta de los grupos delictivos ante operativos de las fuerzas de seguridad. Las autoridades continúan monitoreando la situación, mientras que el gobierno federal ha expresado su disposición para apoyar al estado en el restablecimiento de la seguridad.