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Los vehículos eléctricos se deprecian más rápido que los de gasolina. La tecnología cambiante afecta su valor de reventa, influyendo en las decisiones de compra futuras.
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Desafíos de Reventa para Vehículos Eléctricos en México

En los últimos años, los vehículos eléctricos han ganado popularidad en todo el mundo debido a su contribución a la reducción de emisiones de carbono y a su menor dependencia de combustibles fósiles. Sin embargo, un nuevo informe sugiere que estos vehículos podrían estar enfrentando un desafío importante respecto a su valor de reventa.

Depreciación de vehículos eléctricos

La consultora iSeeCars realizó un estudio reciente que revela que los autos eléctricos presentan tasas de depreciación más elevadas que los vehículos de gasolina convencionales. Este hallazgo es relevante tanto para los fabricantes como para los consumidores que están apostando por esta tecnología como una inversión a largo plazo.

Según el estudio, varios factores contribuyen a esta mayor depreciación de los vehículos eléctricos. Entre estos se encuentran la rápida evolución tecnológica y los cambios en el mercado. Al mejorar constantemente las baterías y el alcance de los nuevos modelos, los vehículos usados tienden a perder valor más rápidamente.

Los principales datos revelados en el informe son los siguientes:

  • Los autos eléctricos se deprecian en un promedio del 52% en tres años.
  • En comparación, los vehículos de gasolina convencionales se deprecian en un promedio del 39% en el mismo periodo.

El estudio subraya que los consumidores podrían verse disuadidos de comprar vehículos eléctricos si estos no retienen su valor de reventa. Esto podría afectar la demanda de dichos vehículos en el futuro.

Un experto de iSeeCars comentó:

“A medida que avanza la tecnología de las baterías, los modelos más antiguos pierden atractivo, lo que impacta en su valor de reventa.”

A pesar de estos desafíos, la transición hacia una movilidad más sustentable sigue siendo una prioridad para muchos gobiernos y empresas a nivel global. Se espera que esta tendencia continúe incentivando la innovación y el desarrollo de tecnologías más avanzadas que eventualmente podrían mitigar los problemas actuales de depreciación.

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