El Gobierno de México ha puesto en marcha una ambiciosa estrategia para impulsar el turismo, enfocándose principalmente en el Mundial de 2026, donde Acapulco y el sureste del país jugarán un papel crucial. La gestión actual ve en estos eventos una oportunidad sin precedentes para promover destinos turísticos que combinan belleza natural y riqueza cultural.
Detalles de la estrategia turística
La Secretaría de Turismo ha delineado varios ejes estratégicos para potenciar el turismo en estas regiones. Según las autoridades, se busca no solo atraer más visitantes, sino también invertir en infraestructura y servicios que mejoren la experiencia del turista.
Entre los objetivos prioritarios se encuentran:
- Impulsar el desarrollo económico local.
- Proteger y fomentar la cultura y tradiciones de las comunidades anfitrionas.
- Integrar tecnología y sostenibilidad en el turismo.
Acapulco, conocido por sus playas paradisíacas y su vibrante vida nocturna, está siendo preparado para recibir a una oleada de visitantes internacionales gracias al Mundial. Esto forma parte de un esfuerzo más amplio para revitalizar su imagen y recuperar su estatus como uno de los principales destinos turísticos del país.
De acuerdo con el Secretario de Turismo, Miguel Torruco, la visión es clara:
“Queremos que quienes visiten México durante el Mundial se lleven una experiencia inolvidable y sean nuestros embajadores en el mundo.”
El sureste mexicano, con sus riquezas naturales y arqueológicas, también tendrá un papel destacado en esta estrategia. Lugares como Cancún, Tulum y las zonas arqueológicas mayas se preparan para una afluencia significativa de turistas.
La inversión en infraestructura y conectividad es parte integral del plan, asegurando que los destinos sean accesibles y cuenten con las instalaciones necesarias para alojar grandes eventos. La expectativa es que este enfoque no solo beneficie la economía local en el corto plazo, sino que establezca bases sólidas para el desarrollo turístico a largo plazo.