El Fondo Monetario Internacional (FMI) anticipa una desaceleración en el crecimiento de la economía mexicana para los años 2024 y 2025. Según su reciente informe de “Perspectivas de la Economía Mundial”, México enfrentará un reto significativo para mantener el impulso económico observado en años anteriores.
Proyecciones del FMI
El FMI ha revisado a la baja sus expectativas para la economía mexicana. En el informe se presenta una disminución en las tasas de crecimiento proyectadas, lo que refleja los desafíos tanto internos como externos que enfrenta el país. Entre las cifras destacadas, el FMI prevé que el Producto Interno Bruto (PIB) de México crezca a un ritmo menor que el esperado previamente.
- Para 2024, se proyecta un crecimiento del PIB del 1.5%.
- En 2025, se anticipa un aumento del 1.8%.
La estimación para 2023 se mantiene en un 2.2%, lo que muestra una disminución comparada con el crecimiento registrado en años recientes. El informe sugiere que estas proyecciones están influenciadas por una menor demanda externa y condiciones financieras más restrictivas a nivel global.
Entre los factores que afectan la economía mexicana se incluye la inflación, la cual ha mostrado cierta reducción, pero sigue siendo un punto crítico para la política monetaria del país. Además, el entorno externo, influenciado por las decisiones económicas de Estados Unidos y otras economías grandes, mantiene su importancia.
Una portavoz del FMI destacó las oportunidades y riesgos que enfrenta México en el actual entorno económico, indicando:
“México tiene el potencial de superar estos desafíos si implementa reformas estructurales adecuadas que fortalezcan su economía interna y mejoren su competitividad internacional.”
En el contexto de estas proyecciones, es crucial que las políticas fiscales y monetarias en México sean cuidadosas y eficientes, buscando siempre mantener la estabilidad económica mientras se incentiva el crecimiento y se reducen las desigualdades.