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La disculpa del CNDH simboliza un avance crucial hacia la justicia y el reconocimiento histórico de Tlatelolco.
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El Comité 68 Pro Libertades Democráticas ha aceptado la disculpa ofrecida por la Presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Rosario Piedra Ibarra, en relación a la masacre de Tlatelolco ocurrida el 2 de octubre de 1968. Este significativo gesto ha sido calificado como un paso importante hacia el reconocimiento y justicia para las víctimas y sus familias.

Un gesto de reconciliación

Piedra Ibarra ofreció esta disculpa durante la conmemoración del aniversario de los trágicos eventos, en un acto donde estuvieron presentes miembros del Comité 68 y otras organizaciones de derechos humanos. Durante el evento, la presidenta de la CNDH expresó su compromiso de trabajar para que este tipo de violaciones a los derechos humanos no se repitan en el futuro.

Esta disculpa es un reconocimiento a los errores del pasado y un compromiso con un México donde prevalezcan los derechos humanos y la memoria histórica.

El Comité 68, que ha luchado por más de cinco décadas para que se haga justicia por los hechos ocurridos en 1968, considera que la disculpa es un importante paso hacia la reconciliación, aunque continúan exigiendo acciones concretas por parte del gobierno para completar el proceso de justicia y reparación.

A continuación, algunas de las demandas del Comité 68:

  • Garantía de no repetición de actos de represión.
  • Memorial permanente en honor a las víctimas.
  • Reconocimiento oficial de la responsabilidad del Estado en los eventos de 1968.

El acto de disculpa forma parte de una serie de acciones emprendidas por el gobierno actual para abordar eventos históricos de represión y violencia estatal, buscando establecer un nuevo paradigma de memoria y justicia en el país.

Se espera que este tipo de gestos permitan abrir un diálogo más amplio sobre otros eventos similares en la historia de México, en un esfuerzo conjunto por alcanzar una reparación adecuada para las víctimas y contribuir a la construcción de un país más justo y democrático.

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