La Fiscalía General del Estado de Guerrero ha defendido las diligencias realizadas tras la masacre ocurrida en el municipio de Coyuca de Benítez, donde 13 personas perdieron la vida. Este incidente, uno de los más violentos en la región en años recientes, ha conmocionado a la comunidad y despertado críticas hacia las autoridades por su manejo de la situación.
Acciones de la Fiscalía
La Fiscalía detalló en un comunicado las acciones emprendidas para investigar el múltiple homicidio. Señaló que se han recolectado pruebas en el lugar de los hechos y se ha iniciado una serie de entrevistas y declaraciones para esclarecer lo sucedido. Buscan identificar a los responsables y entender el móvil detrás de esta violenta agresión.
En el comunicado, la Fiscalía indicó:
“Estamos usando todos nuestros recursos para asegurar que se haga justicia en este caso y devolver la tranquilidad a las familias afectadas.”
Las críticas hacia la actuación de las autoridades llegaron principalmente de familiares de las víctimas y organizaciones de derechos humanos, quienes demandan una investigación exhaustiva y transparente. Señalan una falta de resultados tangibles en el combate a la violencia en la región, a pesar de los esfuerzos supuestamente intensificados.
Entre las medidas inmediatas anunciadas por la Fiscalía, se incluyen:
- Reforzamiento de la seguridad en la zona.
- Operativos en conjunto con fuerzas estatales y federales.
- Fortalecimiento de labores de inteligencia para prevenir futuros incidentes.
Las autoridades han pedido paciencia a la ciudadanía, asegurando que se está trabajando con rigor en el caso. No obstante, la presión se intensifica para que los responsables sean detenidos y se evite un agravamiento de la situación de violencia en el estado.
El contexto de esta masacre se enmarca en una serie de conflictos armados y disputas por el control del territorio en el estado de Guerrero, conocido histórico por su complejidad debido a la presencia de diferentes grupos delictivos.