Durante la temporada navideña, muchas familias en Italia llevan a sus mesas una tradición dulce y suave: el panettone. Este delicioso pastel, con un origen que se remonta al siglo XV en Milán, ha conquistado a personas de todo el mundo por su sabor y textura.
Origen e historia del panettone
El panettone tiene sus raíces en varias leyendas milanesas. Una de las más populares relata que el cocinero de Ludovico el Moro, Duque de Milán, se enfrentó a un problema cuando el postre navideño se quemó. Para salvar la cena, un joven ayudante llamado Toni improvisó con los ingredientes sobrantes, creando un pan dulce que resultó ser un éxito entre los comensales. Desde entonces, se le llamó “pan de Toni”, que evoluciona a “panettone”.
La receta original del panettone incluye harina, levadura, huevos, mantequilla, azúcar y frutas confitadas. Este pastel es conocido por sus tiempos prolongados de fermentación, lo cual le proporciona su característica textura esponjosa.
En los últimos años, la popularidad del panettone ha crecido fuera de Italia. En México, este dulce ya se encuentra en muchos supermercados al llegar diciembre y forma parte de las tradiciones navideñas de muchas familias.
El consumo de panettone en Italia es significativo. Según datos recientes:
- Se producen alrededor de 30 millones de panettones cada año en Italia.
- El 70% de los italianos disfruta de este pastel durante las fiestas decembrinas.
- Su exportación ha aumentado un 10% anual en la última década.
“El panettone no solo es un postre, es una experiencia que reúne a las familias”, menciona Giovanni Ferrero, un conocido chef italiano.
Hoy en día, además de las variedades clásicas, existen panettones con chocolate, cremas, pastas de nueces y hasta versiones especiales para personas con restricciones alimentarias.
El impacto cultural del panettone trasciende fronteras, demostrando que la buena comida puede unir a las personas, independientemente de