En el área de Santa Fe, Ciudad de México, las obras del Tren Interurbano México-Toluca han generado un aumento significativo de baches en las calles aledañas, deteriorando la calidad de vida de los habitantes y quienes transitan diariamente por la zona. Este problema se ha convertido en un tema importante tanto para residentes como para el gobierno local, que intenta encontrar soluciones efectivas a la situación.

Impacto de las obras en Santa Fe

Vecinos de la zona han manifestado su descontento debido a los daños causados en sus vehículos y la dificultad para transitar por calles que antes consideraban en buen estado. La construcción del tren interurbano, que busca mejorar la conectividad entre la Ciudad de México y Toluca, ha dejado como consecuencia un aumento en el desgaste del pavimento, debido al paso constante de maquinaria pesada y vehículos de carga.

El gobierno local ha reconocido el problema y ha informado que se están realizando evaluaciones para intervenir en las áreas más afectadas. No obstante, los ciudadanos piden acciones inmediatas, alegando que los costos de reparación y mantenimiento de sus vehículos se han elevado considerablemente.

Según datos recogidos, las calles más afectadas han experimentado una proliferación de baches, que no solo ralentizan el tráfico, sino que también representan un riesgo para la seguridad vial. Las autoridades han sido informadas de que las condiciones del pavimento empeoran continuamente debido a las incesantes lluvias y la falta de mantenimiento adecuado.

El impacto de estas obras puede resumirse en los siguientes puntos:

• Aumento significativo de baches en las calles aledañas.
• Daños constantes a los vehículos que transitan por la zona.
• Riesgos crecientes para la seguridad vial.

Autoridades locales intentan mitigar el impacto negativo de estas obras. Un funcionario comentó:

“Estamos trabajando para encontrar soluciones que minimicen el impacto en la comunidad, siendo conscientes de los inconvenientes que estas obras han ocasionado.”

La situación ha generado una creciente urgencia por recobrar la transitabilidad y seguridad de las calles de Santa Fe, mientras que los residentes continúan esperando un remedio tangible para el