En Estados Unidos, decenas de manifestantes latinos se reunieron el domingo en Pensilvania para protestar contra Donald Trump, en un contexto de creciente tensión social y política a medida que se acercan las elecciones presidenciales de 2024. La manifestación, que tuvo lugar en la ciudad de Filadelfia, fue organizada por grupos proinmigrantes y de defensa de los derechos civiles que buscan expresar su rechazo a las políticas y retórica del exmandatario, especialmente en temas relacionados con la comunidad latina.
Rechazo a la retórica de odio
Los organizadores del evento afirmaron que el objetivo principal de la protesta era condenar lo que consideran un discurso de odio persistente promovido por Trump y sus aliados. Recordaron que durante su presidencia, Trump implementó políticas que afectaron negativamente a los inmigrantes, como la separación de familias en la frontera y el endurecimiento de las restricciones de asilo. Estas acciones, según los manifestantes, continúan impactando a las comunidades latinas en todo el país.
“Estamos aquí para decir basta al odio y a la división. La comunidad latina ha demostrado ser una fuerza indomable y seguiremos luchando por nuestros derechos,” declaró María Gutiérrez, una de las organizadoras de la marcha.
Filadelfia, una ciudad con una significante población latina y un importante bastión demócrata, se ha convertido en un escenario clave para las movilizaciones en contra de Trump. Además de las preocupaciones sobre políticas de inmigración, los manifestantes también alzaron la voz sobre temas como el cambio climático, la reforma policial y el acceso a la atención médica.
Algunos de los puntos resaltados por los organizadores sobre los impactos de las políticas de Trump incluyen:
- Más de 500 mil familias separadas en la frontera bajo políticas anteriores.
- Reducción significativa en el número de visas de trabajo otorgadas.
- Aumento en las deportaciones de individuos sin antecedentes penales.
Los manifestantes esperan que su mensaje resuene a nivel nacional y motive a otros a exigir un cambio en la dirección política del país. Mientras tanto, la campaña de Trump sigue avanzando, reafirmando su discurso y