El Instituto Nacional Electoral (INE) de México podría retrasar la aprobación del presupuesto para la elección presidencial que se llevará a cabo en 2024. Este postergamiento surge debido a discrepancias sobre las cifras exactas necesarias para llevar a cabo de manera efectiva el proceso electoral.
Discusiones en el Consejo General del INE
Durante la última reunión del Consejo General del INE, se discutió la posibilidad de ajustar el presupuesto debido a cambios recientes en el proceso, incluidos algunos recortes propuestos por el gobierno. El consejero presidente del INE mencionó que buscarán asegurar que los recursos asignados sean suficientes y eficientemente administrados para garantizar una elección libre, equitativa y transparente.
“Estamos evaluando con detenimiento todas las partidas del presupuesto para asegurarnos de que cada peso se utilice de manera responsable en un momento tan crucial para nuestra democracia”, comentó el consejero presidente.
El análisis del presupuesto está tomando más tiempo del esperado, ya que se están revisando cifras de elecciones pasadas para ajustar el presupuesto con base en experiencias previas y previsiones futuras. La necesidad de un análisis detallado se debe también a la inclusión de procedimientos de seguridad adicionales que aseguren la transparencia del voto.
Algunos de los datos preliminares sobre el presupuesto incluyen:
- Evaluación de costos operativos para más de 160,000 casillas.
- Revisión de gasto en capacitación de personal.
- Provisión de tecnología para el monitoreo de resultados en tiempo real.
Ante esta situación, el INE ha asegurado que a pesar del retraso, la autorización del presupuesto no afectará el calendario electoral ni el desarrollo adecuado de las elecciones. La institución insiste en que cada aspecto del proceso se está considerando minuciosamente para no comprometer la calidad del ejercicio democrático.
Se espera que el próximo mes la discusión avance y se logre una resolución sobre el monto final que será propuesto para la aprobación. Esto proporcionará tanto a la ciudadanía como a los partidos políticos la confianza necesaria en que el próximo proceso electoral se llevará a cabo sin contratiempos financieros.