En un contexto de crecientes tensiones, la comunidad empresarial de México ha expresado su preocupación por las recientes propuestas de reforma judicial impulsadas por el Gobierno. Esta inquietud surge debido a que podrían influir negativamente en la renegociación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), uno de los acuerdos comerciales más importantes para el país.

Impacto en el T-MEC

Los representantes del sector privado han señalado que las reformas judiciales propuestas tendrían repercusiones significativas en la percepción de los inversores extranjeros. La confianza en un sistema judicial imparcial y eficiente es un pilar fundamental para fomentar inversiones y mantener relaciones comerciales estables con socios internacionales. Las reformas podrían dar lugar a un escenario de mayor incertidumbre jurídica, lo que no solo afectaría a las futuras inversiones, sino también la relación con los países miembros del T-MEC: Estados Unidos y Canadá.

Un destacado empresario mencionó:

“Modificaciones de esta naturaleza podrían interpretarse como un debilitamiento institucional, lo cual es preocupante para el clima de negocios en México.”

El sector empresarial ha insistido en la necesidad de evaluar cuidadosamente las implicaciones de estas reformas antes de proceder, subrayando la importancia de garantizar que cualquier cambio legislativo preserve un entorno de inversión seguro y predecible.

Algunos de los puntos de preocupación expresados por los empresarios incluyen:

• El riesgo de que disminuya la confianza internacional en el sistema judicial mexicano.
• Posibles repercusiones en las futuras inversiones extranjeras directas.
• Impactos potenciales sobre las relaciones comerciales dentro del T-MEC.

Finalmente, los líderes empresariales enfatizaron la importancia del diálogo entre el Gobierno, el poder judicial y el sector privado para encontrar soluciones que fortalezcan la economía nacional y fortalezcan la posición de México en el panorama comercial internacional.