En Nuevo Laredo, Tamaulipas, se han presentado denuncias sobre abusos por parte de militares en distintos retenes colocados en la ciudad. Algunos ciudadanos han manifestado que han sido objeto de intimidación y amedrentamiento, lo que ha generado un clima de inseguridad e inconformidad entre la población local.
Crecen las quejas ciudadanas
En las últimas semanas, diversos habitantes han alzado la voz para denunciar lo que consideran un abuso de poder por parte de las fuerzas armadas. Especialmente, se han reportado situaciones en las que civiles son detenidos sin justificación aparente y se les exige brindar información personal con un trato rudo e irrespetuoso.
Una de las personas afectadas relató su experiencia a los medios de comunicación. Según el testimonio, fue detenida y obligada a bajar de su vehículo sin explicación alguna. Uno de los soldados involucrados le dijo a la persona involucrada:
“¡Bájese del carro y no haga preguntas!”
Este tipo de actos ha propiciado un debate sobre los derechos civiles y el papel de los militares en tareas de seguridad pública. Varios ciudadanos han solicitado la intervención de las autoridades pertinentes para investigar estos casos y garantizar un trato respetuoso y apegado a los derechos humanos.
De acuerdo con los datos recopilados, se han emitido cifras preocupantes sobre las reclamaciones recibidas por diversas organizaciones civiles:
- Se han registrado al menos 50 denuncias en los últimos tres meses.
- Un 60% de los casos reportados incluyen quejas de trato intimidatorio.
- El 30% de las acusaciones mencionan la exigencia de pagos no oficiales.
Las organizaciones de derechos humanos han empezado a documentar estas denuncias con el fin de enviar informes detallados a las autoridades, esperando una pronta respuesta que ayude a restaurar la confianza de la ciudadanía. Ante esta situación, la población de Nuevo Laredo espera que las fuerzas armadas actúen de maneratare responsable y profesional para garantizar la seguridad sin menoscabar los derechos de los habitantes.
