El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha anunciado que TD Bank acordó pagar una multa de 3 mil millones de dólares para resolver acusaciones de lavado de dinero relacionadas con el tráfico de drogas del cartel. Este acuerdo marca uno de los mayores acuerdos de cumplimiento en el ámbito bancario hasta la fecha, destacando la importancia de las regulaciones y la vigilancia en la industria financiera.
Acuerdo sin admisión de culpa
Aunque TD Bank ha decidido resolver el caso mediante este pago masivo, la entidad bancaria no ha admitido ningún acto ilícito. La decisión de llegar a un acuerdo se debe, según el banco, al deseo de evitar un prolongado litigio que podría resultar costoso y distractor para sus operaciones.
“Estamos comprometidos a mantener los estándares más altos en cuanto a compliance y a trabajar de la mano con las autoridades para asegurar la integridad de nuestro sistema financiero”, dijo un portavoz de TD Bank.
El caso se centra en las actividades del banco relacionadas con transacciones que involucraron sumas significativas de dinero pertenecientes a organizaciones dedicadas al narcotráfico. El Departamento de Justicia destapó deficiencias en los mecanismos de control de TD Bank que permitieron que ocurriesen estas transacciones sin las alertas adecuadas.
El banco también se compromete a fortalecer sus sistemas de monitoreo para prevenir futuros incidentes de esta naturaleza. Esto incluye mejorar sus sistemas de detección de actividad sospechosa y reforzar su equipo de cumplimiento.
Los detalles del acuerdo incluyen:
- Pago de 3 mil millones de dólares como compensación.
- No admisión de culpabilidad por parte de TD Bank.
- Compromiso de mejorar los mecanismos de control y monitoreo de transacciones.
Con este acuerdo, TD Bank espera reducir el impacto potencialmente negativo que el litigio podría haber tenido sobre sus operaciones y reputación. El Departamento de Justicia, por su parte, enfatiza la monumentalidad de la multa como una advertencia a otras instituciones financieras sobre la seriedad con la que se deben abordar las regulaciones contra el lavado de dinero.