La Ciudad de México se enfrenta nuevamente a la problemática de las tomas clandestinas de combustible, un fenómeno que representa un riesgo significativo para la seguridad pública y el medio ambiente. En recientes operativos, las autoridades de la capital han identificado una toma ilegal en la Alcaldía Miguel Hidalgo, una de las más céntricas y populosas de la ciudad.

Descubrimiento y Operativo

Fue durante una inspección de rutina que personal de seguridad detectó la anomalía cerca de la Avenida Río San Joaquín. Las autoridades locales, en coordinación con elementos de la Guardia Nacional y personal de Petróleos Mexicanos (PEMEX), aseguraron el lugar para evitar mayores riesgos. Se ha iniciado una investigación para determinar los responsables y el alcance de la operación ilícita.

Los expertos advierten que las tomas clandestinas no solo suponen un riesgo de incendio y explosión, sino que también presentan un problema ambiental grave, ya que las fugas de combustible pueden contaminar el suelo y el agua.

Las autoridades han estado intensificando los operativos de vigilancia en toda la ciudad, especialmente en aquellas zonas donde se ha identificado un mayor riesgo de actividades ilegales relacionadas con el robo de combustible.

Ante este descubrimiento, los residentes de la zona expresaron su preocupación por la seguridad de sus hogares y la posibilidad de afectaciones ambientales.

“Nos preocupa mucho que esto esté sucediendo tan cerca de nuestras casas. Esperamos que las autoridades tomen medidas rápidas y efectivas”, comentó un vecino que prefirió permanecer en el anonimato.

Las cifras de tomas clandestinas en el país han sido alarmantes en los últimos años, con un notable aumento en ciertas regiones. El Gobierno ha intentado diversas estrategias para mitigar este problema, que afecta no solo a la economía nacional sino también a la seguridad de los habitantes.

Datos recientes revelan:

• El año pasado se registraron miles de tomas clandestinas en diversas entidades del país.
• La Ciudad de México ha reportado un incremento en los casos detectados.
• Las pérdidas económicas debido al robo de combustible ascienden a millones de pesos anualmente.

Las autoridades continúan sus esfuerzos para erradicar esta práctica ilícita