La autopista México-Querétaro ha sido identificada como un corredor crítico para la venta de combustible robado, conocido popularmente como “huachicol”. Este tramo de carretera, que es uno de los más transitados del país, se ha convertido en un punto caliente para esta actividad ilegal. Según reportes recientes, cada 100 metros se podría detectar un punto de venta de huachicol a lo largo de esta ruta.
Venta ilegal en la autopista
De acuerdo con las investigaciones, estos puntos de venta ilegales se encuentran a menudo camuflados a plena vista, utilizando incluso vehículos particulares y estaciones de servicio clandestinas. La Secretaría de Seguridad ha identificado un aumento en la operación de estas actividades ilícitas, las cuales son difíciles de erradicar debido a la facilidad con que los delincuentes establecen nuevos puntos de venta.
Los responsables de la seguridad en la región han intensificado sus esfuerzos, aunque reconocen que es un reto siguiendo el nivel de sofisticación que las bandas criminales han alcanzado. Un representante de la secretaría, que prefirió mantenerse en el anonimato, declaró:
“Estamos trabajando en coordinación con diferentes niveles de gobierno para desmantelar estas redes, pero los esfuerzos deben ser constantes y muy estratégicos.”
Para tener una idea clara del problema, aquí hay algunos datos estadísticos significativos:
- Se estima la existencia de un punto de venta de huachicol cada 100 metros en un tramo particular de la autopista.
- Los operativos han incrementado en un 30% en el último año, centrados principalmente en las áreas de mayor incidencia de esta actividad ilegal.
- Se han identificado al menos 50 vehículos utilizados como puntos de venta móviles en la región.
A pesar de los esfuerzos de las autoridades, la demanda de combustible robado sigue siendo un problema persistente, alimentado por los precios altos y la disponibilidad limitada de combustible en algunas zonas. La población que opta por este mercado negro parece no disminuir, complicando así la labor de las autoridades para contener el problema.
Se espera que en el futuro próximo las autoridades instalen más puntos de control y realicen operativos sorpresa para asegurar la carretera y disuadir a los responsables de continuar con esta actividad